Enfermedades en los gatos 

Si llevas un tiempo conviviendo con un gato, te habrás dado cuenta de que son profesionales en el disimulo. Si han roto un plato, mirarán hacia el otro lado para no levantar sospecha. Siempre intentan aparentar que todo está bien, por lo que a veces es difícil saber si están enfermos. 

Es por este motivo que los dueños de los gatos debemos de estar muy atentos a posibles cambios en su físico y en su comportamiento, ya que estos pueden ser señales claras de que algo no está yendo como debería. 

Volvemos a insistir, ante cualquier sospecha de enfermedad debemos visitar al veterinario, ya que prevenir es siempre mejor que curar. Las visitas rutinarias al especialista son muy importantes a la hora de detectar y evitar problemas de salud. 

En este post os hablaremos de las enfermedades más comunes en gatos, pero antes hablaremos de los síntomas ante los que nos debemos alertar. 

Síntomas de un gato enfermo


Cambios en el apetito 

En este aspecto podemos compararnos con nosotros los humanos. Cuando tenemos mal cuerpo, es habitual perder las ganas de comer. No debemos preocuparnos si un día puntual nuestro gato no come, pero sí debemos estar atentos por si esto se alarga en el tiempo. 

También debemos percatarnos si está comiendo más de la cuenta, ya que existen enfermedades como el hipotiroidismo o la diabetes que favorecen la ingesta de comida. 

Es posible que estos síntomas se deban a la comida para gatos que toma tu gatete. Algunos piensos no están elaborados con los mejores ingredientes, incorporan más de los que deberían o contienen potenciadores del sabor. Desde BigMastotas te recomendamos siempre que opten por comida natural para gatos, en cuya elaboración se ha evitado añadir el menor número de agentes artificiales y aditivos químicos. 

Cambios en el peso 

Tanto si gana peso como si lo pierde, aunque esté comiendo con normalidad, es un indicio de que algo le está ocurriendo. 

Ingesta excesiva de agua 

No será preocupante si lo hace durante un verano muy caluroso, pero si en épocas más frías. Enfermedades como la insuficiencia renal o la diabetes pueden provocar esto. 

No orina o lo hace de forma excesiva 

En ambos casos puede estar padeciendo problemas urinarios. 

Vómitos y diarrea 

Nuestro gato puede vomitar puntualmente porque un día haya comido más de la cuenta y se esté purgando o porque esté expulsando una bola de pelo. Lo mismo ocurre con la diarrea, puntualmente no es preocupante, pero si persiste puede indicar la presencia de parásitos, de una infección o de intestino inflamado. 

Cambios en la higiene

Si nuestro gato deja de acicalarse, puede ser un indicio de que le duele la boca o que tiene gingivitis. Lo notaremos porque tendrá el pelo sucio, sin brillo y apelmazado. En su piel pueden aparecer escamas blanquecinas parecidas a la caspa. 

Si por el contrario se limpia de manera excesiva, puede indicar una alergia o presencia de parásitos. También un exceso de lamido puede significar que le duele una zona concreta. 

Cambios en el pelo y en la piel 

Pueden estar causados por parásitos externos o internos, hongos en la piel, malnutrición, alergias o incluso enfermedades mentales y estrés. 

Mal aliento

La causa más común del mal aliento en los gatos es la acumulación de sarro en su dentadura. Con el tiempo, esta puede llegar a originar placa dental e inflamación en las encías (gingivitis). 

Dificultad en el movimiento 

Si tarda en levantarse o acostarse, no salta tan alto como suele hacerlo o le cuesta subir y bajar escaleras, puede ser un indicio de problema en huesos y articulaciones. 

Las enfermedades más comunes en los gatos 

Son numerosas las enfermedades que pueden padecer los felinos, pero aquí enumeramos algunas de las más frecuentes: 

Conjuntivitis

Los ojos son uno de sus puntos más débiles. Las legañas, inflamación, rojez y picor son los síntomas más comunes. 

Otitis 

Se produce por la presencia de parásitos como son los ácaros. Lo reconocerás por la incomodidad que demuestra al rascarse, además puede aparecer un tipo de secreción marrón en las orejas. La otitis les puede generar dolor y pérdida de audición. 

Problemas gastrointestinales 

Son fáciles de detectar, ya que aparecerá diarrea, vómitos, dolor abdominal, pérdida de apetito o debilidad. Normalmente es producido por la ingesta de un alimento en mal estado, pero también nos puede indicar la apariencia de virus, infección bacteriana o parásitos. 

Inmunodeficiencia felina (sida felino) 

Se contagia a través de la sangre y de la reproducción. La acción del virus es similar a la del VIH, provocando una depresión generalizada del sistema inmunitario. Por el momento no hay vacuna para esta enfermedad, por lo que debemos evitar que nuestro gato esté en contacto con otros felinos que puedan estar infectados. 

Leucemia felina 

Es un tipo de cáncer que se transmite por contacto de los fluidos corporales (orina, sangre o saliva). Los síntomas frecuentes son la falta de apetito, la somnolencia, anemia, aparición de tumores… Puede ser evitada con vacuna. 

Cistitis 

Se produce por la formación de minerales que obstruyen el conducto urinario. Pueden generar dolor al orinar, sed, ausencia total de micción, o que de repente nuestro gato orine en otro sitio que no sea la caja de arena. Puede ir acompañado de sangrado. 

Rabia 

Es producida por un virus que se transmite a través de la mordedura o arañazo de un animal enfermo. Se puede transmitir de animales a humanos y viceversa. Es una enfermedad mortal, aunque en España se considera una enfermedad erradicada gracias a las vacunas. 

La aparición de enfermedades a veces es inevitable. Sin embargo, con la castración, la vacunación, el desparasitado y las visitas rutinarias al veterinario estaremos contribuyendo a que nuestro gatete goce de buena salud y tenga una buena calidad de vida. 

Comments (0)

No comments at this moment

New comment

Producto añadido a tu lista de deseos
Poducto añadido para comparar

En Big Mascotas utilizamos cookies propias y de terceros. Si continuas navegando, consideramos que aceptas su uso. Click aquí para más información.